¿Qué es el autismo?
El autismo forma parte de los Trastornos del Espectro Autista (TEA). Es una condición neurológica y de desarrollo con un componente genético que se manifiesta durante los tres primeros años y dura toda la vida. Afecta el comportamiento, la interacción, la comunicación y el aprendizaje de la persona autista.
Las características del autismo son:
- Dificultades para entender la ironía y las bromas. Toman las cosas en sentido literal.
- Realizan movimientos repetitivos.
- No miran a la cara a los demás.
- Retraimiento, dificultades de interacción social.
- En caso de autismo severo no tienen contacto con la realidad, ni se relacionan con nadie.
¿Cuáles son las causas del autismo?
Las causas del autismo incluyen factores ambientales, biológicos y genéticos. En una familia con un niño/a autista, la probabilidad de tener otro hijo/a con autismo es alrededor del 5%. Algunos trastornos emocionales como la psicosis maníaco-depresiva, ocurren más a menudo en familias con una persona con autismo.
En pocos casos, el comportamiento autista es causado por:
- Rubéola en la madre embarazada
- Esclerosis tuberosa
- Síndrome de X frágil (la forma más común de retraso mental hereditario)
- Encefalitis (inflamación del cerebro)
- Fenilcetonuria no tratada, cuando el cuerpo carece de una enzima necesaria para el metabolismo
Otras causas son las toxinas ambientales, como pesticidas y metales pesados como el mercurio. Puede ser que las personas con autismo, o aquellos con mayor riesgo de desarrollarlo, sean más sensibles a estas toxinas.
¿Cuáles son los síntomas del autismo?
Los síntomas fundamentales del autismo en adultos y niños son dos:
- Deficiencias persistentes en la comunicación verbal y no verbal, y en la interacción social.
- Presentan patrones restrictivos y repetitivos de lenguaje, del comportamiento, de intereses y de actividades en general.
Para saber si tu hijo es autista prestá atención a estos síntomas del TEA infantil:
- Falta de interés por los otros niños.
- Evitan el contacto físico.
- Comportamientos extraños, repetitivos y auto estimulantes como el balanceo, el movimiento de aleteo de manos o caminar de puntillas.
- No comparten ni acostumbran señalar con el dedo aquello que les llama la atención para compartirlo con los demás.
- Escaso contacto visual, no observan la expresión del interlocutor.
- No acostumbran a realizar la sonrisa social.
- Ausencia de juego simbólico como dar de comer a muñecas o jugar a los autitos como si fueran de verdad.
- Lenguaje literal, en el caso de existir lenguaje. No entienden las bromas, los chistes, los dobles sentidos ni las metáforas.
- Hipersensibilidad táctil, olfativa, gustativa y auditiva.
- Poca sensibilidad al dolor.
- Reaccionan poco ante la voz de sus padres, lo que puede confundirse con déficit auditivo.
¿Cuáles son los distintos trastornos del espectro autista?
La clasificación internacional de trastornos mentales más importantes: Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders-5 (DSM-5), reconoce el autismo como trastornos del neurodesarrollo. Es decir que tienen origen en el periodo de gestación. Se caracterizan por deficiencias en el desarrollo que producen limitaciones en áreas específicas o globales.
Además, el autismo pasa a denominarse Trastornos del Espectro Autista (TEA), ya que reconoce la sintomatología autista común a todos los individuos en un amplio abanico de fenotipos.
Los 5 tipos de trastornos del espectro autista son:
- Trastorno autista, autismo infantil o Síndrome de Kanner123. Presenta las características anteriores.
- Trastorno de Asperger o Síndrome de Asperger. Autismo leve, con un desarrollo lingüístico aparentemente normal y sin existencia de discapacidad intelectual.
- Trastorno de Rett o Síndrome de Rett. Solo se da en niñas e implica una rápida regresión motora y de la conducta antes de los 4 años. Está asociado a una discapacidad intelectual grave. Causado por mutaciones en el gen MECP2124.
- Trastorno desintegrativo infantil o Síndrome de Heller. Muy poco frecuente. Después de un desarrollo inicial normal se desencadena una pérdida de las habilidades adquiridas anteriormente. Se asocia a discapacidad intelectual grave y a un incremento de alteraciones en el EEG y trastornos convulsivos.
- Trastorno generalizado del desarrollo no especificado. Agrupa todos los casos en los que no coinciden claramente con los cuadros anteriores, o bien se presentan de forma incompleta o inapropiada los síntomas de autismo en cuanto a edad de inicio o existencia de sintomatología subliminal.
¿Cuáles son las consecuencias del autismo?
Las consecuencias del autismo son:
- Incapacidad mental del niño/a.
- Aislamiento de todo su entorno.
- Dificultad ante cambios de rutina.
- Habilidad y actividad motora desigual.
- Falta de temor ante los riesgos.
- Aquellos con más nivel intelectual, notan que son diferentes y no entienden qué les pasa.
- No encajan en la sociedad.
¿Cómo ayudar a una persona que sufre autismo?
Para ayudar a un hijo con autismo podés desarrollar una serie de estrategias en tu casa. El día a día de un niño autista se denomina autismo diario. Educar a un niño con autismo requiere estar informado y contar con herramientas para acercarse a su mundo interior y entenderlo.
- Cuidá su dieta. Una alimentación libre de gluten y caseína, que se encuentran en los alimentos a base de harina de trigo y en la leche y sus derivados, puede mejorar los síntomas.
- Jugá con el/ella. Es una estrategia excelente para desarrollar sus habilidades psicomotoras y comunicativas, estimular el lenguaje y fomentar un clima de bienestar en el hogar. Además, fortalecerá el vínculo emocional.
- Enseñale a desarrollar rutinas. Para estimular la seguridad en sí mismo, hacerlo sentir más cómodo en su entorno, y facilitar el aprendizaje de determinados hábitos y conductas sociales. Podés empezar con hábitos sencillos como lavarse las manos antes de comer o cepillarse los dientes antes de acostarse. De allí pasar a rutinas más complejas como recoger sus juguetes después de jugar o poner la mesa.
- Motivalo constantemente. Una de las cosas que le cuestan a un niño con autismo es involucrarse en nuevas tareas o planes que se salgan de la rutina habitual. Hacer actividades diferentes le ayudará a abrirse al mundo y mejorar la comunicación con el entorno.
- Que practique un deporte.
- Realice un taller.
- De paseos a distintos lugares.
Además existen varios tests según la edad y en función de la afectación leve o moderada. Son herramientas para que en caso de sospecha de autismo nos quitemos la preocupación o confirmemos el riesgo de autismo antes de acudir al especialista. También se aplican pictogramas (dibujos sencillos) para la comunicación y organización de los escenarios que se encuentran en la casa, como la cocina, el baño, la habitación.
¿Quién te puede ayudar?
El autismo no tiene cura. Para tratarlo es importante la colaboración con un psicólogo o psicopedagogo, para que juntos armen un plan de educación flexible que se adapte a las necesidades del niño en cada momento de su desarrollo.
Un tratamiento psicoterapeútico será necesario. En el caso de niños autistas será adecuado contactar con un psicólogo/a que trabaje la psicología infantil. En nuestra página Mundopsicólogos.com.ar encontrarás profesionales especializados en trastornos del espectro autista (TEA). Ellos tienen experiencia en tratamiento del autismo en niños y adultos.
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