Relaciones tóxicas ¿Cómo salir?

Las relaciones se construyen siempre, y por lo tanto implican responsabilidad propia (no culpabilidad, no es lo mismo). Estamos implicados en esa relación que no nos genera placer, o por lo menos no el placer que en su momento nos generaba, y con el tiempo se fue transformando en proveedora de malestar.

Es dable preguntarnos en primera instancia qué tenemos que ver nosotros en eso que nos está pasando. Cuánto de lo que sucede ocurre porque lo permitimos, porque cedemos, porque aún recibiendo señales importantes consideramos que es "un momento", "que esto tiene que mejorar".

Las relaciones tóxicas son difíciles de finalizar. Se presentan como vínculos desgastantes expresados en la comunicación, en el trato que termina desgastando la propia autopercepción.

Entonces la pregunta es ¿cuál es el límite que no puede ni debe superarse? Un buen punto de partida para responder esto sería el amor propio. La sensación de no respeto del otro y la sensación de que estamos sucumbiendo al destrato debería ser una buena señal para categorizar de tóxica a la relación.

¿Esto implica que debemos abandonar la relación ipso facto? NO. De ninguna manera. Implica que va siendo necesario hacer un alto en la relación, tomarse un tiempo para analizar y consolidar una instrospección (mirarse para adentro) y detectar los aspectos de la relación que para nosotros implican deterioro del amor propio y/o destrato del otro. Es muy loable ir haciéndolo con tiempo, tomarse el tiempo...ir escribiendo, anotando en papel esos aspectos y cuando consideramos que existen una cantidad de elementos razonables intentar una charla con el otro.

Puede que uno sea reacio a hacerlo. Bueno, es un buen momento para intentar una terapia de pareja que facilite la comunicación y desarme los mecanismos obsesivos del miembro de la pareja que no dispone de los elementos como para sostener la charla. Hay personalidades obsesivas que se angustian demasiado ante la falla. Que los pone mal la queja del otro. Que sienten de manera inconciente que cuando el otro demanda, le está endilgando responsabilidad en esa demanda. Algo así como, "el/ella no se siente bien en la pareja y por lo tanto yo cubro las espectativas, por lo tanto ya no me quiere".

¿Entonces, cómo salir de una relación tóxica sin dejar a la pareja?

Insisto, esto es una ecuación inconciente. Este tipo de personas homologan la parte al todo. Muy bien, es este es trabajo que se debe abordar, primero en charlas propias, luego recurrir a una ayuda profesional psicológica que puede ser una terapia de pareja, en donde ambos miembros del vínculo amoroso se ponen de acuerdo en la necesidad de ayuda externa para superar el malestar. Y finalmente si nada de esto logra correr de su propio eje a quien / quienes no pueden darle lugar a la demanda del otro. Probablemente hayan aparecido los elementos que nos permitan pensar en nosotros, y aunque duela, entender que el lugar que el otro nos asigna atenta contra un mínimo de valoración propia, inconsistente con una vida emocional sana.

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